Círculo de Confianza (13)
MARK
Esta Semana Santa una tía de mi padre me sorprendió diciendo: “Un tío de tu padre era como tu, odiaba a los curas y su mejor amigo era el cura de Santurtzi”. Mark tiene todo lo que menos me gusta en una persona: es cura (pastor evangelista), americano y votante republicano y encima del Madrid. Lo tiene todo para ser una persona con la que no compartiría mucho en mi vida, pero los dos años que pasamos juntos en el euskaltegi fueron muy buenos. No se si disfrutábamos mas chinchando a los demás o a nosotros mismos, aunque últimamente disfrutamos intentando convertirnos el uno al otro. Se ha empeñado en que sea creyente y yo en que deje su religión. Vaya pareja. Es como un niño grande, le gusta jugar continuamente y yo le suelo llamar “Padre Tuck” por su afición a “robar” las cosas de los compañeros de clase. He conocido muchos curas a lo largo de mi vida y casi todos me parecían tan hipócritas como la Iglesia en la que creen, pero él es diferente, un buen tipo, honesto y aunque en muchas ocasiones estoy en desacuerdo con él y con sus creencias, es de esa clase de personas con las que puedes tener una discusión sin necesidad de tener que levantar la voz, simplemente intercambiar palabras.
Esta Semana Santa una tía de mi padre me sorprendió diciendo: “Un tío de tu padre era como tu, odiaba a los curas y su mejor amigo era el cura de Santurtzi”. Mark tiene todo lo que menos me gusta en una persona: es cura (pastor evangelista), americano y votante republicano y encima del Madrid. Lo tiene todo para ser una persona con la que no compartiría mucho en mi vida, pero los dos años que pasamos juntos en el euskaltegi fueron muy buenos. No se si disfrutábamos mas chinchando a los demás o a nosotros mismos, aunque últimamente disfrutamos intentando convertirnos el uno al otro. Se ha empeñado en que sea creyente y yo en que deje su religión. Vaya pareja. Es como un niño grande, le gusta jugar continuamente y yo le suelo llamar “Padre Tuck” por su afición a “robar” las cosas de los compañeros de clase. He conocido muchos curas a lo largo de mi vida y casi todos me parecían tan hipócritas como la Iglesia en la que creen, pero él es diferente, un buen tipo, honesto y aunque en muchas ocasiones estoy en desacuerdo con él y con sus creencias, es de esa clase de personas con las que puedes tener una discusión sin necesidad de tener que levantar la voz, simplemente intercambiar palabras.
Etiquetas: Familia
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