Luchando contra el paso del tiempo

Este sábado se presentaba muy interesante. Tenía ganas de salir a tomar un par de copas con mis amigos y ver que tal estaba Natxete con su depre, pero un día que parecía tan propicio para la fiesta se fue estropeando antes de amanecer.
Llevo arrastrando un fuerte dolor de espalda desde hace un par de meses y como soy muy tozudo y no me gustan los matasanos, pues lo llevo como mejor puedo. Vamos, mordiéndome las uñas. Por la noche debí comer algo que me sentó mal, porque me pase la noche del viernes al sábado sentado en el Trono del Rey. Tan mal lo estaba pasando y tantas ganas tenía de estar en otro sitio que no fuera ese que me esforcé en no ir tan de continuo al baño. Así que con todas mis fuerzas apreté los dientes y aguante tumbado en la cama los duros retortijones. Debí hacer mucha fuerza y debí poner demasiada tensión en mi dolida espalda que el resto de mi cuerpo se resintió. Así pues, el sábado amanecí con un tirón en la ingle izquierda. Casi no podía ni apoyar el pie, y cuando lo hacia era para ver la bella constelación de Casiopea a plena luz del día. Hubiese sido cuanto menos cómico si no fuese porque sufro de insomnio desde los 15 años y me cuesta dormir y con el esfuerzo realizado debí quedar profundamente dormido a eso de las 7 de la mañana. El gran problema no es que consiguiese dormir 3 horas seguidas (gran bendición), si no que debí quedarme dormido sobre mi brazo diestro, con lo que cargue todo mi peso sobre el. Amanecí, pues, con dolor en la espalda, un tirón en la ingle izquierda, diarrea y el hombro y la muñeca derecha prácticamente inmovilizados. Un autentico cromo. Hoy, domingo, poco queda de la diarrea salvo una ligera molestia, nada del tirón en la ingle y todo el dolor de la espalda. Del atrofiamiento articular de mi brazo derecho solo quedan unas secuelas que descubrí al hacer un gesto despectivo a un amigo con mi dedo corazón. ¡¡¡¡¡Me crujió entero!!!!! Por lo que se ve deberé de ser menos expeditivo mi gesticulación y deberé conformarme con mi elocuencia verbal. Vamos, como los viejos.
Hoy he visto que el paso de los años me acerca inexorablemente al asilo y a este paso, demasiado deprisa. Esta visto que nos hacemos mayores, pero esperaba poder llegar a los 45 antes de que comenzasen a hacerse patentes los síntomas de la vejez. Las canas no es lo único que parece hacerme indicarme que estamos en el declive. En fin.